Vuelta a casa...
Ya estoy en casa.
Sólo espero no roncar nunca... Menudas nochecitas me han dado mis dos compañeros de viaje. No quiero que nadie me odie nunca como yo les estaba odiando a las 4 de la madrugada del domingo.
Ya estoy en casa.
Sólo espero no roncar nunca... Menudas nochecitas me han dado mis dos compañeros de viaje. No quiero que nadie me odie nunca como yo les estaba odiando a las 4 de la madrugada del domingo.
2 comentarios
oroD -
Créeme, uno se llega a acostumbrar. Ahora, cuando E respira fuerte, no me molesta.
anita -