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Viaje a los sueños (polares)

Relojeando

Relojeando

Tengo un reloj de esos que no necesitan pilas, sino que tieenn un mecanismo que los hace funcionar con la energía del movimiento del portador. Me lo regaló mi madre y, aunque al principio no quería ponérmelo por miedo a rayarlo, romperlo o perderlo, ya es parte de mí.

El problema es que normalmente se me adelanta unos 15 segundos cada día. Yo pensaba que estaba estropeado, y lo llevaba al relojero. Éste me decía que el reloj estaba perfectamente afinado, que funcionaba a la perfección. Y yo no era capaz de convencerlo de lo contrario.

Desde que convivo con mi inseparable esguince, el reloj funciona con total precisión. Así que he llegado a la conclusión de que el mecanismo de mantener en marcha los engranajes no está preparado para mi ritmo de vida normal, y que tendré que encontrar a un artesano suizo que sepa calibrarlo.

3 comentarios

kaveri -

Una amiga mía consiguió en 15 días parar su reloj, y el de tres personas que pasaron la tarde con ella... Nos daba miedo a todos, pero también despertaba curiosidad. Le pedimos que doblara cucharas con su mente pero nunca lo logró.

brocco -

tica tac..
hace años tuve q camabirme le reloj de muñeca, porque en la izquierda se paraba. donde lo compré me dijeron q podía ser cosa de la circulación (esa savia corriendo por mis ramas). m quedé flipá, probé por probar y funcionó. el caso es q el reloj era a pila, no comprendo, oiga.

flexo -

¿a ti o al reloj?
hum difícil lo tienes me parece
un abrazo