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Viaje a los sueños (polares)

Queda terminantemente prohibido

¡¡Ponerse malo este fin de semana!!

Miedo...

Dos picaduras en mi cuerpo... Espero que ninguna pulga se haya venido conmigo de la casa de pastores en la que he pasado un rato esta tarde.

Como los monos

Dejarse llevar por la emoción y perseguir macacos por las montañas nevadas, puede tener consecuencias negativas para la epidermis de las manos, que se resiente después de tener que agarrase a piedras congeladas y con aristas afiladas. Además de que luego las he pasado canutas para bajar de donde había trepado, una vez alcanzado el punto de "por aquí ni de coña subo"

Salió el sol

Salió el sol

Salió al fin el Sol después de un invierno concentrado en cinco días, y salí yo al campo a buscar huellas en la nieve. Me lo he pasado como un enano, eso sí, mis pies mojados después de la primera media hora no han sido lo mejor del día...

Estoy loco...

Sabes que has pasado demasiado tiempo en Marruecos cuando... (XI)

... no te asombra ver a los habitantes de tu pueblo, bereberes de pura cepa, caminar sobre la nieve con zapatos de goma, pantalones largos pero finos y con agujeros, y una cazadora abierta sobre una camisa y una camiseta, coronado por un gorro de lana calado hasta las orejas. Después de todo, ya te asombraste cuando les viste con ese mismo atuendo en pleno verano (¿¿hace sólo dos meses de eso??), ¡¡con 40 grados más de temperatura!!

Frío (polar)

En mi pueblo nieva. Echo de menos mi ropa de invierno que mi hermano se llevó a Estonia. Cometí un fallo cuando estuve en Alicante: no comprar más cosas. Aunque nadie esperaba que viniera esta ola de frio ahora. No es normal.

Me he mudado de zulo. Ahora estoy en uno igual de pequeño y con menos mobiliario aún (con el cambio, he perdido la cama en la que no quepo que me servía de sitio para dejar todo encima). Pero al menos, en vez de hacer muchísimo frío en la habitación, sólo hace mucho frío...

 

Halloween un año más

Sólo he celebrado Halloween un año más. Por regla general se me hace extraño celebrar esta fiesta tan poco española, pero estando fuera de España no me costó demasiado meterme en el ambiente, visitar el mercado que hay junto al puerto y volverme a casa en el tranvía con una calabaza enorme bajo el brazo.

Con mi amiga Elena vaciamos la calabaza y le hicimos una cara no demasiado tétrica. Nos hicimos unas fotos muy divertidas en su casa los tres (ella, yo y la calabaza). Y tomamos tarta.

Luego vino la gran duda... ¿Qué hacer con casi tres kilos de pulpa de calabaza (estimación mía)? Yo hice tortilla de calabaza y un pstel muy rico, el resto creo recordar que se lo zampó Elena, que para algo era mi vegetariana de cabecera en aquellos momentos.

PD: Que miedo, no puedo colgar ninguna foto porque Google está caído...

Montañas con sombrero blanco

Las montañas de mi cordillera se han puesto guapas, con su sombrero blanco. Pero sopla un viento helado sobre el valle que hace demasiado obvio que mi zulo no está pensado para ser habitado (en verano era un horno, pero como a la noche refrescaba no era tan grave; ahora el vaho es mi compañero al acostarme y al despertarme.

Creo que no pasaba tanto frío desde el año que pasé en Helsinki. Aunque quizás tenga algo que ver el hecho de que el último invirono que pasé fue el del 2007, ya que al de 2008 le di esquinazo pirándome al Hemisferio Sur.

Y mientras, otr@s contentos de que por fin haya llegado el invierno; o viviendo al lado del Círculo Polar; o en Creta con los peces; o en las Canarias, con máster de Interpretación  y Acuicultura. Y a veces, me apetecería estar en todos esos sitios a la vez.

Sabes que has pasado demasiado tiempo en Marruecos cuando... (X)

Sabes que has pasado demasiado tiempo en Marruecos cuando... (X)

...cuando te has terminado los 300 sudokus que venían en tu teléfono móvil (¡y eso que hasta llegar aquí sólo había hecho tres!)

 

¿Y ahora qué haré en mis ratos de espera?

Menudo titular...

El hogar, el lugar donde se producen más accidentes domésticos

Las mujeres sufren más percances que los hombres, sobre todo en la cocina

EFE - Madrid - 27/10/2008

El periodista "se lo ha currado"...

Visita relámpago

He hecho una breve pero intensa visita relámpago a mi tierra para asistir a la boda de mi muy mejor amigo de la carrera en Murcia (y compañero de colegio mayor). Me ha cundido bastante, ya que además he ido al cine a ver una peli impresionante, Camino (que panzada a llorar); he salido de fiesta por Alicante en buena compañía, y he coincidido con muchos amigos a los que hacía años que no veía...; he desayunado churros con chocolate; he visto a mi mamá :)

Y en la boda... genial. No conocía a casi nadie pero si alguna vez me caso, espero que mis amigos se lo pasen en mi boda tan bien como me lo pasé yo en ésta... La ceremonia fue breve pero Mowgli (mi amigo) hizo que fuera divertida; la comida estaba muy rica (incluído el centro de mesa); y la música del baile fue sencillamente genial, una mezcla de la música que marcó mis años de Colegio Mayor con algunos de los nuevos clásicos que han surgido en los últimos años. Faltó una de Piratas al menos, es mi único pero. Aunque casi ni los eché en falta, ¡no había tiempo entre tanto temazo!

AVE: Atraco a Viajeros Eco-concienciados

AVE: Atraco a Viajeros Eco-concienciados

Me encanta que se fomente el uso del transporte responsable. Un billete de tren entre Madrid y Barcelona, en clase turista, cuesta la friolera de 105€... A no ser que tengas suerte de pillar plaza en el que vale 35€ (que sólo viaja una vez al día, y eso es un decir, ya que es nocturno y tarda nueve horitas).

¡¡Sí al tren de Alta Velocidad, pero a precios asequibles!! Lo que me sorprende es que no haya habido una rebelión de viajeros. Miedo me da cuando se termine el AVE a Alicante

Marca

40 tés en 4 dias... no esta mal

Chimeneas Vivas

En el pueblo ya humean las primeras chimeneas. La de mi casa, que atraviesa mi habitación, también. Hoy huele a matorral mediterraneo al despertar...

Día en el taller

No por mí... sino por mi coche, que ha empezado a hacer un ruido raro... Y me ha tendio todo el día ocupado; mejor dícho, ha tenido al mecánico todo el día buscando una pieza. Yo mientras me he dedicado a leer, por no desesperarme...

Lo bueno de dormir tirado en una alfombra...

(o en la cama pequeña de un hostal en Marrakech) es que es más fácil evitar que se instale a tu lado la insoportable soledad, con sus pies fríos, su afán por robarte la manta y sus altisonantes ronquidos a medianoche.

¿Cuantos hogares se pueden tener?

Hoy he llegado a mi pueblo de Marruecos, y al ver desde la ventana del taxi (compartido con otras 5 personas, y más el conductor) la silueta familiar de mis montañas, me he empezado a sentir en casa. Lo extraño es que en el último mes he estado en tres lugares diferentes en los cuales me he sentido como en casa, y si me siento generoso, casi en cuatro.

Eso podría significar quizás que tengo facilidad para hacerme con los sitios; o que en realidad no estoy totalmente en casa en ninguno de los sitios. Pueden haber muchas interpretaciones. Lo único que sé es que, en cualquiera de esos lugares, me sentía muy a gusto y totalmente en mi entorno.

Enésimo

Perdí la cuenta ya de las veces que he empezado a escribir un post y luego se ha quedado a medias sin enviar. No conté mi reencuentro con mi amigo de Azerbaiyán y su piso que parece la ONU porque se me acabó la batería del portátil; no conté las fiestas eternas y las caminatas nocturnas para llegar al gimnasio donde dormía en Aachen porque desapareció la red wifi cuando más la necesitaba; no conté la excitación de hablar ante 600 personas porque me llamaron urgente a una reunión y tuve que cerrar la sesión antes de tiempo. Y luego, las veces que me he quedado con las ganas de contar aquí más cosas.

Pero ahora puedo contar que me lo he pasado en grande en Maastricht, en Aachen y en Barcelona. Que he dedicado más tiempo a estar con mis viejos amigos que a hacer nuevos contactos. Sin olvidar lo productivo del viaje, con una reunión de preparación, una asamblea general con una propuesta mía aprobada por el 90% de los participantes, y un congreso mundial de conservación en el que he aprendido más del apasionante mundo de las empresas.

Y ahora a Canarias.

La quinta del setentayocho

La cena de anoche con mis compañeros de instituto fue todo un éxito. Hubo anécdotas que pasarán al repertorio que serán recordadas en cada reencuentro, hubo momentos para ponerse al día de las vidas de los que andan más perdidos, y muchas, muchas risas bien altas.

Una de las cosas que más me gustan de mi casa es que se pueden hacer cenas en el jardín; con mantel a cuadros, tortillas de patata caseras y refrescos de dos litros. Y una tarta de tres quesos para chuparse los dedos.

Relax en Alicante

Sacarme el nuevo DNIe (con su chip tan moderno, y su foto en ByN tan retro) en menos de 20 minutos. Ponerme el recuerdo de una vacuna, hacerme un análisis de sangre. Seguir recibiendo regalos de mi cumpleaños, y estrenar otros. Ir al cine a ver la última de Mr. Allen, o asistir a un preestreno de futuro incierto por las críticas leídas. Desayunar churros, ¡comer! (se acabó el Ramadán), y cenar croquetas de mi madre. Ir a un concierto de Iván Ferreiro y canatrme todas sus canciones. Ver a un montón de amigos, e intentar ver al resto antes de irme. Ver a mi madre (cuando se deja). Hacer una cena con la quinta del 78 en mi casa.

Me encanta descansar...