Ensoñación tropical
Esta noche pasada he soñado que vagaba por una isla desierta, y me estaba muriendo de hambre y de sed. Durante mucho tiempo, o esa fue la sensación que tuve yo. De pronto, avisté un coco varado en la orilla. Y algo más lejos, la silueta de un cocotero preñado de frutos: mi salvación. Ha sido un sueño muy poco onírico. Cada parte del cuerpo sintiendo la realidad como algo propio.
De pronto encontré en mi mano un machete, y con un golpe seco cortaba la parte superior del coco, con facilidad; como lo vi hacer decenas de veces en Belize. El frescor dulce del agua en mi garganta reseca, la ternura de la pulpa fresca y carnosa entre mis dientes. El olor a coco en la piel.
Esta mañana en la radio, la canción de Volován:
Y las caricias que me das tirados en la arena, con olor a coco protector de sol....
¿Señales? Pienso que es quizá el momento de pensar en sacar ya los billetes de avión a mi isla, para huir del invierno.
De pronto encontré en mi mano un machete, y con un golpe seco cortaba la parte superior del coco, con facilidad; como lo vi hacer decenas de veces en Belize. El frescor dulce del agua en mi garganta reseca, la ternura de la pulpa fresca y carnosa entre mis dientes. El olor a coco en la piel.
Esta mañana en la radio, la canción de Volován:
Y las caricias que me das tirados en la arena, con olor a coco protector de sol....
¿Señales? Pienso que es quizá el momento de pensar en sacar ya los billetes de avión a mi isla, para huir del invierno.
3 comentarios
Aldeana -
oroD -
javier -
a la protagonista le encantaba el invierno, por que la hacia sentir viva.
que bueno que te guste mi blog,
ahi te agregue a los links del mio
beso!